¿Y a mi qué me importa?

No lea esto, a usted no le sirve

¿Qué puede importarle a Ud. la histeria de esos señores aburridos de la bolsa de valores? A nadie importa que estos señores se vayan al tacho y pierdan plata como nunca en su vida lo han hecho. No es necesario saber ni entender lo que pasa, igual yo no estaré mejor ni peor, porque una burbuja de ignorancia y desinterés me protege de las locuras y desmanes de estos señores aburridos y gritones de Wall Street.

Tampoco importa, a esta altura, convencerme de que mi burbuja de incultura se pinchará como una burbuja del mercado, y me dejará desnudo a merced de la solidaridad de algún familiar. ¿Para qué saber que mi sueldo, mi jubilación o las ganancias de mi empresita corren peligro en los próximos meses? ¿Para qué, si de todas maneras, cuando quede en la calle, encontraré pronto a alguien para echarle la culpa de mi desgracia?

Pues bien, no lea esto, porque a usted no le sirve: la crisis financiera mundial afectará a todo el mundo, por sobre todo a la gente más humilde, y más aún a los desinteresados en el tema. Los magos de las finanzas, como el multimillonario Warren Buffet, sentirán en cambio algo así como una picadura de mosquito, pero luego saldrán a la caza de oportunidades, y con seguridad comprarán empresas por la nada y se harán más ricos con la crisis.

Usted tambien puede encontrar oportunidades en este nuevo escenario. Pero no lo haga, no es necesario. Cuando se le pinche su burbuja tendrá tiempo suficiente para llorar y buscar culpables. Tendrá todo el día. No tendrá otra cosa que hacer.

PD: esperamos que el sarcarsmo haya sido efectivo y usted comprenda la importancia de estar al día con estos temas. Con un poco de Google, encontrará las explicaciones que necesita. No es el fin del mundo, hasta nos animamos a pensar que en el futuro esta será una experiencia beneficiosa, que los cambios que vendrán harán que el sistema sea un poco más justo para todos. Pero eso es el largo plazo. Mientras tanto, vaya abrochándose el cinturón, que viene un aterrizaje forzoso.

NOTA ACLARATORIA:
Este artículo de opinión, junto con el siguiente (Cristina y la crisis global) fueron escritos a fines de septiembre. Hasta esa fecha, aún no se había anunciado la estatización de las AFJP, ni se había previsto la desaceleración de la economía, ni la suba del dólar, ni el blanqueo de capitales. Eso sí: hablábamos del pago al Club de París. A riesgo de quedar un poco desactualizados, decidimos igual publicar estas notas, como para ir previniendo a nuestros lectores en que todavía queda mucho por ver y sufrir a causa de esta crisis.